En el Liceo Javier, 25 educadores y 78 padres y madres de familia participan actualmente en los Ejercicios Espirituales, un proceso que busca fortalecer la relación entre la fe y la vida cotidiana. Cada semana, los participantes reciben puntos de meditación y tienen un espacio de acompañamiento de 20 minutos, donde pueden compartir sus reflexiones y experiencias.
A través de esta práctica, se busca que cada persona descubra el sentido profundo de su vida y aprenda a integrar su espiritualidad en el día a día.Este proceso, basado en el método de San Ignacio de Loyola, permite a los participantes tomar conciencia de su propio camino y liberarse de aquello que les impide crecer. Más que una simple práctica de oración, los Ejercicios Espirituales son una invitación a un cambio profundo, donde se promueve el servicio, el compromiso y una mayor entrega a los demás.
